En la actualidad, el Fidget Spinner se ha convertido en el juguete de moda entre los niños de todo el entorno. Este pequeño artefacto, originario de Estados Unidos, ha generado tanto interés que ha llevado a los maestros a buscar formas de prohibirlo en las aulas. Sin embargo, no es tarea fácil, ya que se vende como una herramienta de ayuda para aquellos que padecen déficit de atención.
El concepto básico del spinner es sencillo: consta de tres aros unidos entre sí, con un círculo en el centro que funciona como eje giratorio. La gracia de este juguete es precisamente su capacidad para girar constantemente.
¿Por qué es tan popular?
El spinner se ha vuelto muy popular debido a su capacidad para brindar diversión y entretenimiento. Es por eso que podemos encontrarlo en paradas de autobús, parques y, por supuesto, en las escuelas. Aunque originalmente fue creado hace más de dos décadas como un símbolo de paz, hoy en día se ha convertido en un juguete de moda y en el centro de una controversia que involucra a estudiantes, maestros y administradores escolares.
Algunas escuelas han comenzado a enviar cartas a los padres de familia pidiendo que los niños dejen de llevar los spinners a clase, ya que se consideran una distracción y una molestia para el desarrollo de las actividades académicas. Sin embargo, la controversia radica en que muchos de estos juguetes se comercializan como herramientas de ayuda para aquellos que padecen autismo, déficit de atención, estrés, ansiedad y hasta depresión. Se venden como dispositivos que supuestamente aumentan la capacidad de enfoque.
No es raro escuchar a un estudiante responder a su maestro cuando le piden guardar su spinner diciendo: lo siento, me lo recetó el doctor. Esto se debe a que el número de casos de déficit de atención en Estados Unidos ha aumentado significativamente en los últimos años. Según datos de 2015 de las autoridades sanitarias del país, el 11% de los niños entre 4 y 17 años padecen esta condición.
La controversia en las escuelas
Tanto los educadores como los administradores escolares están al tanto de esta tendencia. Si bien reconocen que algunos especialistas recomiendan el uso de los spinners como terapia de ayuda, también entienden que no pueden permitir que estos juguetes afecten el orden y la disciplina en el aula.
Bill Mitchell, maestro y especialista en administración educativa, afirma que en su escuela ha notado una disminución en los casos de estudiantes que causan problemas desde que comenzaron a usar los spinners. Sin embargo, entiende la preocupación de otros maestros y considera que es necesario establecer reglas claras para su uso.
Algunos planteles educativos en estados como Illinois, Massachusetts, Minesota, Florida y Nevada han comenzado a implementar reglas para contrarrestar la invasión de estos juguetes. Por ejemplo, en algunas escuelas solo se permite llevar un spinner acompañado de una nota médica que especifique las razones y usos del artículo.
El futuro del spinner
A pesar de la controversia, muchos consideran que el spinner es simplemente una moda pasajera, al igual que otros juguetes populares del pasado como el yoyó, el trompo o el cubo de Rubik. En algún momento, este juguete dejará de ser tendencia y desaparecerá, aliviando así la preocupación de aquellos que buscan una forma de deshacerse de él.
El spinner es un juguete de moda que ha generado mucha controversia en las escuelas. Aunque se vende como una herramienta de ayuda para aquellos que padecen déficit de atención, su popularidad ha llevado a los maestros a buscar formas de prohibirlo en las aulas. Sin embargo, algunos consideran que es importante establecer reglas claras y encontrar un equilibrio entre el entretenimiento y el desarrollo académico.