El cambio es una constante en la vida. Nosotros cambiamos, nuestro entorno cambia y también nuestras relaciones. Algunas con el tiempo desaparecen, y otras se fortalecen. Lo importante es saber identificar el momento de “dejar ir”, y no aferrarnos a aquello que ya no funciona, solo por el miedo a la pérdida. Es necesario deshacerse de muchos apegos, para poder llenar nuestra vida de nuevas experiencias, personas, cosas y momentos. Y en este post vamos a conocer algunas claves que nos pueden ayudar en esta compleja tarea.
¿Qué significa soltar?
Dejar ir significar soltar, dejar partir, no aferrarnos a situaciones, cosas o personas que nos hacen daño, que no nos aportan calidad de vida o que ya se han ido… es aceptar un cambio en nuestra vida. Podemos vivir la experiencia de dejar ir como una pérdida emocional y/o material, pero hay que tener en cuenta que, en muchas ocasiones, más que una pérdida va a suponer un enriquecimiento en nuestra vida. Dejar ir es, por tanto, un proceso de cambio, de liberación y de aceptación de la realidad.
¿Cómo saber que es el momento de soltar?
Son muchas las circunstancias o situaciones que nos pueden llevar a la necesidad de “dejar ir”.
- La ruptura con una pareja o amigo.
- Un cambio de trabajo.
- Cambio de hábitos de vida o de residencia.
- Cambio de prioridades: dejar ir un proyecto que tenía entre manos.
Aunque también es importante hacer referencia a la necesidad de dejar ir ideas, comportamientos o creencias a las que nos mantenemos atados y que no nos hacen ningún bien.
Las personas nos sentimos más seguras ante lo conocido, por eso en estos momentos de la vida donde tenemos que dejar marchar puede aparecer el temor o la incertidumbre. Son situaciones que, si no se gestionan de forma adecuada, pueden afectar a nuestro bienestar emocional.
Claves para dejar ir
No existe un manual de instrucciones ni una fórmula mágica para dejar ir a alguien o algo sin sufrir. Pero sí que existen algunas claves que nos pueden ayudar a que el proceso sea menos doloroso. Aquí te dejo algunas recomendaciones:
- Sé honesto contigo mismo y permítete expresar tu dolor. Cuando algo se acaba, duele. Y nos tenemos que dar permiso para llorar o desahogarnos, pero también para recordar todo lo que nos aportó mientras duró.
- Autocontrol y evitar exposiciones innecesarias. Cuando estamos en un proceso de ruptura es normal que tendamos a buscar espacios de encuentro con esa persona, o que busquemos en redes sociales como va su vida. ¡Cuidado! Esto no nos hace ningún bien. Sólo alargará el proceso.
- Experimenta cosas nuevas. Intenta canalizar tu energía hacia nuevos proyectos o experiencias. Quizás sea el momento de apuntarte a esa clase de yoga, de baile o de pintura que llevas queriendo hacer tanto tiempo.
- No te culpabilices y acepta la realidad tal como es. Este no es el momento de preguntarnos si el haber actuado diferente, hubiera evitado esta situación. En lugar de culpabilizarte, aprende de la experiencia.
- Rodéate de esas personas que te hacen sentir bien. Apoyarte en aquellos que te quieren y te conocen bien te ayudará a pasar esta etapa.
Al aferrarnos a algo que lejos de aportarnos, merma nuestra calidad de vida, estamos impidiendo que nos pasen cosas nuevas que sí nos pueden aportar más felicidad.
Por qué es importante soltar
En muchas ocasiones hemos permanecido más tiempo del necesario en una situación o relación que nos ha causado más angustia que alegría, ya sea por baja autoestima, codependencia o miedo a intentar cosas nuevas. Aprender a soltar y dejar ir todo aquello que nos perjudica y que nos impide alcanzar nuestro mayor potencial es un acto de amor propio.
Soltar y dejar ir es desprendernos de situaciones, personas, cosas o creencias que nos hacen mal, que nos perjudican o que ya no forman parte de nuestra vida. No tiene que ser necesariamente un adiós o un sacrificio, puede ser un agradecimiento por todo lo vivido y la determinación para seguir por otro camino que enriquecerá nuestro desarrollo personal.
El proceso de soltar puede ser difícil y doloroso, ya que implica reconocer la necesidad de un cambio y transitar por la etapa de aceptación. Pero es necesario para abrir espacio a nuevas experiencias y oportunidades en nuestra vida.
Cómo aprender a soltar a tu pareja
Terminar una relación de pareja puede ser una de las situaciones más difíciles de soltar. Aquí te presento algunos consejos para aprender a soltar a tu pareja de manera saludable:
- Prepárate emocionalmente. Antes de tener la conversación de ruptura, asegúrate de estar preparado emocionalmente. Reflexiona sobre tus sentimientos y asegúrate de que es la decisión correcta.
- Elige un lugar adecuado. Busca un lugar tranquilo y cómodo donde ambos puedan hablar sin interrupciones.
- Habla en persona. Tener esta conversación cara a cara para poder expresar tus sentimientos y escuchar los de tu pareja.
- Sé respetuoso. Aunque la relación esté llegando a su fin, es importante mantener el respeto hacia tu pareja. Evita caer en insultos o críticas destructivas.
- Hazlo de una vez. Evita prolongar la situación y tomar decisiones ambiguas. Sé claro y directo en tu mensaje.
- Mantente firme en tu decisión. Es normal que tu pareja intente persuadirte para que cambies de opinión. Mantén tu postura y recuerda tus razones para terminar la relación.
Aprender a soltar no es fácil, pero es necesario para nuestro crecimiento personal y emocional. Recuerda que soltar no significa fracasar, sino abrir espacio para nuevas oportunidades y experiencias en nuestra vida. Acepta el cambio, permítete sentir el dolor y el duelo, pero confía en que vendrán cosas mejores.
Si te resulta difícil sobrellevar esta situación, no dudes en buscar ayuda profesional. Un terapeuta o coach puede brindarte el apoyo necesario para superar esta etapa y aprender a soltar de manera saludable.